El Museo Etnográfico ‘Casa del Tío Félix’ se convirtió, el pasado sábado, en un Sanatorio Psiquiátrico Experimental. Multitud de personajes de ficción sembraron el terror entre las cerca de 200 personas que no quisieron perderse esta primera cita de la Semana de la Juventud. Niños, jóvenes y adultos, en turnos de 15 ó 20 personas, recorrieron las instalaciones del sanatorio psiquiátrico ‘El último grito’ en una noche aterradora que hizo las delicias de los aficionados a este género.