De siete de la mañana a siete de la tarde, los chavales reciben atención profesional mientras sus padres trabajan en el campo
Un total de 24 niños asisten a la Guardería de Vendimia de Miguel Esteban, un servicio puesto en marcha hace ocho años por el Ayuntamiento miguelete para ayudar a conciliar la vida laboral y familiar de las personas que participan en la campaña de recolección de la uva.
El alcalde de Miguel Esteban, Pedro Casas, que ha visitado a los niños y monitoras, ha asegurado que “este recurso es fundamental en un pueblo como Miguel Esteban donde existe una gran tradición vitivinícola y donde prácticamente todo el mundo participa en la vendimia”.
Casas, que ha estado acompañado por la concejal de Servicios Sociales, Rosario Fernández, señalaba que la Guardería de Vendimia “ofrece los cuidados necesarios y la atención adecuada a los niños, mientras sus padres trabajan en la vendimia”. De este modo, los niños no ven alterado su ritmo normal, mantienen unos horarios y unos hábitos alimenticios e higiénicos correctos, juegan y se divierten, mientras esperan el regreso de sus padres.
Los chavales, de edades comprendidas entre los seis meses y los 12 años, llegan a las siete de la mañana y desayunan. Tras ello, los niños escolarizados, son acompañados a la Escuela Infantil o al colegio, para que asistan a clase como el resto de sus compañeros. A la salida, son recogidos y llevados de nuevo a la Guardería de Vendimia, donde comen, hacen los deberes, juegan y meriendan. Todo ello, bajo la tutela de un total de seis monitoras que también se ocupan de que los bebés tengan todas sus necesidades cubiertas.
Salas dedicadas al estudio, al juego y al descanso, además del comedor, son las instalaciones con la que cuenta la Guardería de Vendimia, que se ubica en la planta superior del Centro de Día. Este recurso, que abrió sus puertas el pasado 18 de septiembre, permanecerá abierto hasta el final de la campaña de recolección de la uva, en torno al 17 de octubre, de lunes a domingo, en horario de siete de la mañana a siete de la tarde.