Miguel Esteban ha vuelto a reiterar su repulsa al terrorismo a través de una concentración silenciosa celebrada a las puertas del Ayuntamiento para condenar el último atentado perpetrado por la banda terrorista ETA que ha costado la vida al empresario vasco Ignacio Uría.
El alcalde, Pedro Casas, ha encabezado los cinco minutos de silencio guardados por una veintena de personas entre las que se encontraban representantes municipales, trabajadores del consistorio y público en general.