Unas cincuenta personas acudieron al II Encuentro Intergeneracional organizado por el Ayuntamiento de Miguel Esteban, en una jornada cargada de juegos y diversión.
Como es tradicional, los alumnos de la Ludoteca se acercaron a los adultos a través de juegos y actividades entretenidas que ayudaron a niños y mayores a suavizar la brecha intergeneracional durante un día.
Unas cincuenta personas acudieron al II Encuentro Intergeneracional organizado por el Ayuntamiento de Miguel Esteban, en una jornada cargada de juegos y diversión.
Como es tradicional, los alumnos de la Ludoteca se acercaron a los adultos a través de juegos y actividades entretenidas que ayudaron a niños y mayores a suavizar la brecha intergeneracional durante un día.
El evento, que duró unas tres horas, se llevó a cabo en la Casa del Tío Félix, que se decoró para la ocasión. Suelos pintados de témpera representaban la tradicional rayuela o caracol. Se colocó en el suelo un tres en raya gigante de plástico, y se pegó un futbolín con cinta aislante.
Los niños presentaron a sus abuelos los juguetes actuales, mientras éstos les enseñaron los juegos más antiguos. Algunas de las actividades innovadoras fueron andar en zancos (antiguos y nuevos) y jugar al futbolín en el suelo. Entre las más antiguas, la rayuela, el caracol y la taba.