Unas 150 mascotas participaron en el tradicional desfile. La novedad este año fue la matanza del cerdo
Alta participación y buen ambiente fueron las notas dominantes este fin de semana en las actividades organizadas por el Ayuntamiento de Miguel Esteban con motivo de la Festividad de San Antón.
Cientos de personas, algunas llegadas de otros municipios, se dieron cita en la puerta de la Iglesia Parroquial de San Andrés para presenciar la tradicional bendición de animales. Perros, gatos, tortugas, hamsters, cobayas, pájaros y caballos fueron los auténticos protagonistas del desfile que recorrió la calle Real hasta llegar a la puerta de la parroquia, a ritmo de la charanga Idos de Tono.
Unas 150 mascotas acompañadas por sus propietarios participaron en esta popular tradición que finalizó con el sorteo de 10 cajas de dulces típicos entre los dueños de las mascotas y la rifa del cochinillo ‘Antonino II’, que recayó en uno de los propietarios de los caballos procedente de Campo de Criptana.
La festividad continuó por la noche con la quema de la tradicional hoguera. Más de 200 personas disfrutaron de una velada en torno al fuego degustando sabrosas viandas asadas en la lumbre.
Este año, como novedad, las Asociaciones de Mayores colaboraron recreando la tradicional matanza del cerdo el pasado jueves, como antesala a los actos centrales.
Como broche a la celebración de San Antón, el Auditorio Municipal acogió el Festival Folklórico de Invierno, que corrió a cargo de la Asociación Danzas y Costumbres. El espectáculo, en el que abundaron las ‘jotas rabiosas’, agradó al público asistente que disfrutó con la animada música y los bailes.