Es obra del miguelete Enrique Felipe Casas y refleja la realidad de este año en el que el Covid-19 obliga a vivir esta tradición dentro de los hogares
El II Concurso del Cartel de la Jota Pujada, organizado por el Ayuntamiento de Miguel Esteban, ya tiene ganador. Se trata de la obra del miguelete Enrique Felipe Casas, que “ha plasmado fielmente la realidad de la fiesta en este 2021 en el que el Covid-19 ha obligado a vivir esta tradición dentro de los hogares”.
Así lo explicaba la concejal de Festejos, Turismo y Tradiciones, Mari Nieves Patiño, quien ha señalado que “es un cartel muy original y emotivo, que nos pone los vellos de punta por los sentimientos encontrados que provoca y que además es un documento gráfico del momento histórico que nos está tocando vivir como consecuencia de la pandemia, un cartel que contará a las generaciones futuras lo que pasó en este 2021”.
En este sentido, Patiño ha destacado la inclusión de elementos como la mascarilla y el gel hidroalcohólico, además del baile por videoconferencia.
La concejal ha indicado que han sido tres los trabajos presentados, todos ellos de gran calidad y realizados por jóvenes de Miguel Esteban, “lo que refleja el talento artístico que existe en nuestro pueblo y también la implicación de los jóvenes con las tradiciones”.
Mari Nieves Patiño ha resaltado que “el jurado lo ha tenido muy difícil porque cada uno de los trabajos presentados tenían ingredientes que los hace muy especiales” porque en uno de ellos aparece la vendimiadora ‘dándole’ a la bandera en el centro del corro mientras cuatro personas bailan la jota y, en el otro, los protagonistas son dos personas mayores de la localidad que ya fallecieron y que eran grandes amantes de esta tradición”.
La concejal ha dado las gracias a todos los participantes “por el esfuerzo creativo y el cariño que han puesto en sus trabajos para ensalzar una fiesta que tiene más de tres siglos, que convierte al Carnaval miguelete en único en el mundo y que significa mucho para todos nosotros”.
Por último, ha animado a todos los migueletes a vivir la Jota Pujada desde casa, bailando y grabándose con familiares de su núcleo de convivencia y cediendo fotografías de las máscaras de antes, “porque este año es la forma más segura de vivir esta fiesta”.