El alcalde destacó que con esta fiesta “descubrimos las raíces y costumbres de nuestro pueblo”
Cientos de personas asistieron anoche al tradicional pregón que marca el inicio de las fiestas de San Isidro, patrón de Miguel Esteban. Música, colorido y mucha tradición se dieron cita en el Auditorio Municipal para resaltar la importancia de agricultores y ganaderos, además del sector primario.
En el acto, el alcalde de Miguel Esteban, Pedro Casas, destacó que la festividad de San Isidro “es una fiesta donde descubrimos las raíces y costumbres de nuestro pueblo” y apuntó que “mayordomos y abanderados son el alma de esta festividad”.
Casas, que agradeció la labor que está llevando a cabo la Hermandad de San Isidro y el impulso de los más jóvenes, recordó que el Ayuntamiento se ha encargado de preparar la Pradera del Santo para que pueda ser disfrutada por todos y pidió la colaboración de toda los vecinos para conservar las mejoras realizadas en “un entorno que, junto a los Charcones, está atrayendo a numerosos visitantes a nuestro pueblo además de ser un paraje natural del que todos los migueletes debemos sentirnos orgullosos y podemos disfrutar”.
Tras recordar que los migueletes “somos gente emprendedora y sabemos actuar para salir adelante en estos tiempos difíciles”, Pedro Casas presentó al pregonero de las fiestas, el ingeniero técnico agrícola José María Almenara.
Natural de Miguel Esteban y Jefe de Sección de Tecnología y Producción Agrícola de la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, José María Almenara realizó una comparativa entre la situación de la agricultura hace unos años y la actual. En este sentido, Almenara recordó que las sobreexplotaciones vitícolas han sustituido a las explotaciones agrícolas en las que se cultivaban diversos productos como la patata, la cebolla o los cereales. “Ahora, nos hemos especializado en producir un solo producto (el vino) y eso tiene ventajas pero también nos hace mucho más vulnerables”, señalaba el pregonero quien añadía que la diversificación de los cultivos disminuía el riesgo de la caída de precios y reducía los riesgos de perder toda la cosecha a causa de las adversidades climáticas ya que el ciclo vegetativo es diferente en cada cultivo.
José María Almenara hizo una especial referencia a la fama de la patata migueleta “un humilde tubérculo que sirvió para erradicar la hambruna que azotaba a Europa en el siglo XVIII y que en nuestro pueblo supuso riqueza y trabajo” y se refirió a temas de actualidad como los desajustes entre la oferta y la demanda, el cambio de tendencia en el consumo de bebidas alcohólicas, el arranque de viñedo o la nueva OCM.
“La crisis golpea a los agricultores y está sometiendo al sector a un presión muy fuerte para que bajen los precios”, indicaba Almenara quien añadía que “el futuro dependerá de la capacidad para adaptarnos a un mercado complejo y cambiante en el que Castilla-La Mancha está llamada a desempeñar un papel importante ya que ha conseguido elaborar vinos de gran calidad, con gran riqueza varietal y a precios muy competitivos”.
El pregonero, que destacó el papel que la mujer ha tenido en las economías familiares agrarias colaborando en tareas como la vendimia, lamentó que “la carrera de relevos esté tocando a su fin en el sector agrario y que hoy pocos estén dispuestos a seguir” y recordó que “la huerta migueleta siempre ha sido sinónimo de calidad”.
Tras el pregón, los Mayordomos y Abanderados subieron al escenario para dar lectura a unas simpáticas coplas en las que se hacía referencia a la situación actual, a las tradiciones migueletas y a la festividad de San Isidro, todo cargado con grandes dosis de humor.
La voz y el arte de la joven migueleta Ángela Patiño que interpretó dos temas de Ana Belén y de Rocío Jurado, y las jotas de la Asociación Cultural ‘Danzas y Costumbres’ de Miguel Esteban pusieron el broche final a este acto en el que la Junta Directiva de la Hermandad de San Isidro entregó diversas placas de agradecimiento y reconocimiento al pregonero, a los Mayordomos, a los Abanderados, y a miembros de la hermandad.
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