Este año, numerosos niños han bailado en el ‘corro’ simbolizando el futuro de esta tradición migueleta que pasa de generación en generación
Miguel Esteban ha vuelto a convertirse en epicentro de todas las miradas con la celebración de la tradicional Fiesta de la Jota Pujada, un evento que tiene sus orígenes en el siglo XVIII y que convierte al Carnaval miguelete en único en el mundo. A los pies de la estatua de la vendimiadora, en los arcos de la entrada del Parque Municipal ‘Nuestra Señora del Socorro’, vecinos y visitantes han formado el típico círculo o ‘corro’, emblema de una de las costumbres más arraigadas y estandarte del patrimonio festivo y cultural de Miguel Esteban.