Más de 200 personas asistieron a esta ‘terrorífica’ representación
El Museo Etnográfico ‘Casa del Tío Félix’ volvió a transformarse anoche en un terrorífico lugar para acoger una de las actividades más esperadas de la Semana de la Juventud: la Noche del Terror.
Más de 200 personas de todas las edades pasaron por las dependencias de este espacio convertido en la ‘Casa de los Robenson’, lugar donde según se contaba al inicio de la representación se habían producido algunas muertes de niños.
La decoración de cada rincón de la casa y los tenebrosos personajes que aparecían en las diferentes escenas recreadas contribuyeron a convertir a los visitantes en testigos de esta ‘aterradora’ experiencia.
Camas ensangrentadas, bañeras con restos de sangre o una sartén repleta de ojos que estaban siendo cocinados, fueron algunos de los detalles que podían apreciarse en este siniestro recorrido en el que no faltaron otros elementos como la aparición de una persona poseída, la habitación de los juguetes, un cementerio con lápidas infantiles o una capilla con un sacerdote muy peculiar.
Un total de 25 personas, entre ellos los 5 becarios contratados por el Ayuntamiento de Miguel Esteban para hacer prácticas en verano y veinte voluntarios, fueron los encargados de la puesta en escena de esta peculiar representación que comenzó a las diez de la noche y se prolongó hasta la una y media de la madrugada.
El concejal de Juventud, Juan José Rescalvo, destacaba el gran trabajo realizado por los becarios y los voluntarios para sorprender a los visitantes y que la Noche del Terror haya vuelto a ser todo un éxito.