Testimonios, poesías y baile, además de una exposición fotográfica fueron algunas de las actividades desarrolladas

Miguel Esteban rindió un sincero y merecido homenaje a la mujer rural migueleta con diferentes actividades que sirvieron para poner en valor el destacado papel que la mujer ha jugado en el desarrollo de los territorios rurales.

Decenas de personas llenaron el Museo Etnográfico ‘Casa del Tío Félix’ para escuchar testimonios y poesías, además de admirar diferentes imágenes que pusieron de manifiesto el trabajo que las mujeres han desempeñado en las últimas décadas en el municipio.

En el acto, el alcalde de Miguel Esteban, Pedro Casas, calificó a las mujeres rurales como “el pilar fundamental y el sostén de las familias”, además de destacar que “las mujeres han tenido una misión y fundamento esencial en nuestra historia reciente”. Asimismo, indicó que Miguel Esteban es un pueblo muy emprendedor y que la base de ese emprendimiento reside en las mujeres.



Por su parte, la concejal de Igualdad, Mari Nieves Patiño, destacó la “importancia que la mujer rural ha tenido en el desarrollo de los municipios, tanto en lo social como en lo económico” y apuntó que todo eso se ha querido recoger en la exposición fotográfica y de utensilios.

Por último, la presidenta de la Fundación ‘De igual a igual’, que gestiona el Centro de la Mujer miguelete, Ana Gómez, resaltó el carácter participativo de esta iniciativa y recalcó que “la mujer ha sido el motor del desarrollo en el medio rural”.



El acto contó con el testimonio de una migueleta, Maximina Patiño, quien fue contando algunas anécdotas de su vida, haciendo especial hincapié en las tareas del campo. Maximina resaltó que todas las mujeres de su edad han trabajado mucho “y hemos pasado mucho” ya que les tocó vivir la postguerra.



Asimismo, otras migueletas Esperanza Moreno y Emilia Jiménez, leyeron sendas poesías escritas por ellas mismas en homenaje a la mujer. El folclore también estuvo presente de la mano de una pareja, integrante de la Asociación Folclórica ‘Danzas y Costumbres’, que bailó la jota ataviados con traje de faena.

El acto, que concluyó con una degustación de gastronomía típica migueleta, también sirvió para inaugurar la exposición ‘Mujer y Agricultura en femenino’ donde pueden contemplarse unas 50 fotografías antiguas y diferentes utensilios agrícolas como tijeras de podar, seras, aceiteras, un burro o aparato para hacer morcillas, cucharas de alpaca, fuelles o tablas para lavar, entre otras muchas cosas.