También ha instalado contadores inteligentes en varios puntos de la red de distribución de agua para detectar averías de forma más rápida
El Ayuntamiento de Miguel Esteban continúa realizando mejoras en la red de abastecimiento de agua y saneamiento de la localidad para ofrecer un mejor servicio a los vecinos y solucionar problemas puntuales.
Esta semana han dado comienzo las obras de mejora en el alcantarillado en diferentes puntos de la localidad. En concreto, se va a actuar en la urbanización El Campillo donde se va a sustituir la fosa séptica por un colector general; en la urbanización El Tinto, a la que se va a dotar de red de saneamiento; y en un tramo de la calle Camilo José Cela, en la que también se va a instalar un tramo de saneamiento.
Los trabajos también incluyen la pavimentación de las calles donde se actúe, así como la ubicación de imbornales y la instalación de acometidas en las viviendas donde sea necesario.
La inversión asciende a 73.000 euros y está financiada con cargo al Plan de Obras de la Diputación Provincial de Toledo.
El alcalde miguelete, Pedro Casas, explicaba que “se trata de pequeñas actuaciones que no son muy visibles pero sí muy necesarias y que darán solución a problemas puntuales relacionados con la recogida de aguas en unas zonas residenciales donde cada vez viven más personas”.
Contadores inteligentes
Por otro lado, el Ayuntamiento ha sectorizado la red de abastecimiento de agua y ha instalado cinco contadores inteligentes en los cinco ramales que la componen con el objetivo de poder detectar de manera más rápida, directa y eficiente cualquier avería que se produzca y poder solucionarla cuanto antes.
Pedro Casas indicaba que “es un adelanto tecnológico que hemos incorporado a un servicio que consideramos esencial como es el agua, con el fin de gestionarla de la mejor manera posible para evitar pérdidas de un bien tan escaso y necesario como es el agua, además de reducir los tiempos en los cortes de agua mientras se localiza la avería y de disminuir el gasto”.
Esta actuación ha supuesto una inversión de cerca de 30.000 euros, que han sido aportados al 50% por el Ayuntamiento y por la Diputación Provincial de Toledo.