Miguel Esteban volvió a brillar y disfrutar a lo grande del que es sin duda su deporte rey, el baloncesto, con el amistoso internacional que anoche disputaron la Selección Española Sub-18 y Grecia en un auténtico partidazo que congregó a unos 800 aficionados de la localidad migueleta y la comarca en las gradas del Pabellón IES Juan Patiño.